Violencia vs Besos.

De verdad que lo digo siempre y no me cansaré de reptirlo: ¡coño!, ¡haz el amor y no la guerra! que ya lo decía nuestro colega Lennon.... Pero no, ¡a la gente le molesta el amor!, ¿por qué?, pues no lo concibo, es inaúdito, pero es real...y si no, como podemos explicarnos que dos mujeres lesbianas que se besaron en un bar, hayan sido agredidas físicamente por hombres y que una tercera mujer que se acercó a ayudarlas, fuera agredida también. Mi pregunta es: ¿tanto molesta el amor a la gente como para andar "pegando" al personal?...., ¿es cuestión de uno de los siete pecados capitales: la envidía?....¿o es qué tanta "inmoralidad" les produce la homosexualidad ya sea entre hombres o entre mujeres?.... Yo desde aquí os mando a todo el personal homosexual, heterosexual, bisexual y del color de la sexualidad que hayáis elegido, mi máximo apoyo para que sigáis besáandoos siempre, por encima de todas las cosas, "más vale amar que pegar" y si el que nos tira la primera piedra va de religión, pues le recordamos aquél fragmento de la Biblia que decía aquello de: ....amaros los unos a los otros.... Ayyyy, cuanto degenerao/a hay por ahí y sobre todo que falta de "pan"... JA,JA,JA...

Os apunto por aquí la noticia que se ha publicado en el periódico digial El Metro:

¿Cómo lo que empieza con un beso termina en agresión? Esa es la pregunta que se hacen tres mujeres que fueron presuntamente agredidas por defender que dos lesbianas puedan besarse en un bar sin ser expulsadas de él. Elena, Ángela y Ana (nombres ficticios debido al temor a sus agresores) aseguraron a Metro, con el parte de lesiones y la denuncia policial en mano, que el pasado jueves fueron golpeadas por dos personas que salieron del bar Casa Parrondo mientras ellas repartían panfletos denunciando lo que, aparentemente, pasó en el local tres semanas antes.

Diversos medios de comunicación se hicieron eco entonces de que dos lesbianas denunciaron a Casa Parrondo por expulsarlas del local, únicamente por besarse. Eso sí, la explicación que dio el dueño del bar, Nicolás Parrondo, fue muy distinta: según él se sacaron un pecho y esa actitud era indecorosa para el resto de los clientes.

Ante la nueva denuncia, Metro trató de ponerse en contacto con la sidrería Casa Parrondo, pero nadie contestaba al teléfono. Unos vecinos aseguraron a este diario, ante la puerta del local, que el bar había cerrado por vacaciones

“Tras la primera manifestación contra la homofobia, el jueves pasado llevamos a cabo otra menos numerosa frente al bar. Éramos unas 15 personas y repartimos panfletos con la noticia que había salido en varios periódicos. De repente, y cuándo sólo quedábamos tres mujeres, un hombre salió del bar y agredió a Ángela”, relata Elena.

Fue entonces cuando, siempre según su testimonio, todo se convirtió en una pesadilla. “Durante la concentración estuvieron todo el rato haciéndonos gestos obscenos. Teníamos que habernos ido, pero ni se nos pasó por la cabeza que nos fueran a pegar. Se les fue la olla y ya está...”, insiste Ana.
“Al final, Ana y yo fuimos a ayudar a Ángela y salió otro hombre del bar y ambos se abalanzaron sobre nosotras”, recuerda Elena. Asegura que la lanzaron contra la pared y que a Ángela le partieron la boca. Literalmente. El parte de lesiones, realizado ese mismo día, deja claro que la demandante tiene una “erosión superficial en el labio inferior, y aqueja dolor en la región facial y cuero cabelludo”.

La justicia dirá. Por ahora, lo único claro es que las tres presuntas agredidas temen incluso acercarse al local. Por ello en este artículo no salen ni sus nombres reales, ni mucho menos se muestran sus caras. “Pensamos que si algo no te parece bien se puede manifestar, de forma pacífica y con respeto. Pero está visto que no”, sentenciaron las tres.

(Fuente: Metro.es)

BESOS, BESOS, BESOS, BESOS, BESOS, BESOS.....

JA,JE,JI,JO,JU.........