sábado, 13 de julio de 2013

FOTO POR TÍ_Pinus Cañeriensis




Especie de despropósito arquitectónico-constructivo, uno más de los muchos que acompañan los asentamientos del Homo Sapiens, mezcla de vulgaridad, mal gusto, desorganización, desorden y ausencia absoluta de pudor, decoro y del más mínimo respeto por la estética.

Su hábitat son las fachadas más ruinosas y miserables de los hogares de la especie a la que se asocia, el hombre. Se caracteriza por surgir adosado a las fachadas, generalmente traseras y ocultas a la propia vista del morador de la vivienda.
Presenta variadas ramificaciones de toda índole, material, calibre y naturaleza, incluso algunas que de manera espontánea surgen a su cobijo, de tipo vegetal, como se aprecia por los brotes verdes que surgen a derecha e izquierda y las humildes florecillas que contra todo pronóstico desafían al inhóspito paraje en el que brotan, y que demuestran que pese a todo, la naturaleza y la vida sólo saben de supervivencia. Sin duda, sustrato, abono y agua no les faltan a las plantas para arraigar y prosperar en este microsistema soez y caótico, como la propia naturaleza de su obrador.

Y es que al mirar hacia arriba mientras paseaba por las callejuelas, me sorprendió encontrar aquel curioso “árbol” de tuberías de uralita, tubos de PVC y cables de todo tipo dibujarse sobre la destartalada y maltrecha pared de viejos ladrillos y sus grandes desconchones.

Me pregunto si serán estos los únicos “árboles” que dejemos a los tataranietos de los nietos de nuestros nietos…

14 comentarios:

  1. ¡Vaya,vaya, con el arbol de uralita...!Qué foto mas espectacular y dificil de conseguir. Me ha gustado y a la vez, sorprendido como siempre. Qué pena que la ciudad se vea "afeada" por esos "árboles"...Sin embargo, señalan el paso del tiempo, del tiempo que deteriora todo, del poco gusto de algunos y sobre todo de la precarioedad, incluso pobreza, de algunas ciudades. Debería de pasar por allí, algún noble arquitecto y sobre todo, la alcaldesa, para que se abstuviera de iniciar nuevas obras, y reparara otras.Un beso Emilio. Chelo.

    ResponderEliminar
  2. Las tripas de la ciudad trepando por la fachada de un edificio, y la naturaleza compensando la fealdad con brotes tímidos de vida, una imagen que se puede trasladar, como metáfora, a muchas situaciones del día a día.

    ResponderEliminar
  3. Para variar, entre comillas, la foto magnífica y el texto también, sobre todo esa alusión que haces al afirmar que la naturaleza y la vida sólo saben de supervivencia.Y ya lo creo que es verdad. El enramaje de tuberías, de tan feo, llega a ser bonito.

    ResponderEliminar
  4. Qué impresionante fotografía.
    El desconchado en la pared, las manchas de humedad, las rejas y por supuesto la tubería... y de pronto la vida.
    Tiene la belleza de lo extraño, de lo visualmente contrapuesto. Supervivencia en el cutre urbano.
    Un abrazo Emilio.

    ResponderEliminar
  5. Impresiona el diseño de la necesidad y la precariedad, pero, despéjame la duda, también debe ser impactante el olor que debe desprender abiertas esas bocas y que de ellas se alimentan tan bien esas hierbecillas tan silvestres.

    Encuentras curiosas imágenes donde nadie mira. Buen ojo!!!

    Besos.

    ResponderEliminar
  6. Así es Chelo. Este "árbol" como muy bien dices habla de miseria y pobreza. Qué distinta visión a la que tiene los pobladores de una urbanización de lujo, y qué mal repartido está todo. Como siempre digo: "y no me quejo"...
    Un beso Chelo!

    ResponderEliminar
  7. "Las tripas de la ciudad trepando"..., es otra forma de ver esa "direccionalidad" que, confieso, no se me había ocurrido. En lo que sí pensaba es en las innumerables metáforas que surgen de cualquier lado sin uno imaginarlo apenas.
    Gracias Marinela!

    ResponderEliminar
  8. Me alegra hayas apreciado especialmente esa reflexión sobre la imparable fuerza de la VIDA con mayúsculas y sin aditamentos de ninguna índole. Vida y fuerza bruta natural, a veces terrible y destructiva, y otras cargada de belleza y armonía. Esa belleza de lo feo me hizo apretar el disparador.
    Un saludo Amparo!

    ResponderEliminar
  9. Las contraposiciones son un recurso del lenguaje que llevado al terreno del "lenguaje fotográfico", ayuda a dotar a la foto de transfondo y mensaje, además de que facilita su lectura, y eso es justamente por mostrar sin adornos esos contrastes llamativos. Me alegra tu lectura de la foto de hoy sea tan acertada.
    Un abrazo Nepalí!

    ResponderEliminar
  10. Jejejejjj..., la verdad es que "a pie de calle" donde yo estaba, pocos aromas llegaban de aquel segundo o tercer piso. Otra cosa será en los aledaños de semejante "árbol"... Mejor es ni pensarlo.
    Gracias por el piropo, que me anima a seguir "mirando".
    Un beso Mar!

    ResponderEliminar
  11. Excelente toma. Bien vista y procesada.
    Felicitaciones.
    Saludos y buen Domingo.
    Ramón

    ResponderEliminar
  12. Muchas gracias, de nuevo viniendo de tí, todo un halago .
    Buena semana para tí y saludos Ramón!

    ResponderEliminar
  13. Pues , me temo Emilio, que al final, esta especie arbórea de sumidero arrastrará en su seno, todos los Bárcenas, Rajoys, ERES, Urdangarines, etc. etc que corren, desgraciadamente por nuestra maltrecha actividad política y financiera.
    Prefiero tu fotografía in situ, que el desagüe que nos espera......
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  14. Y yo Latour, sin dudarlo!!
    Jejejejjj, no había pensado en qué tipo de "subproductos" bajarían por el "tallo", pero así visto, me produce aún más mal rollito.
    Un abrazo!

    ResponderEliminar