Salí a pasear un rato con Valencia rebosante de gente por los cuatro costados. La ciudad no es muy grande, y
el casco antiguo era un auténtico hervidero. Las fallas en las calles, y
las calles llenas de personas. Y las personas llenas de móviles. Y los móviles
se han convertido en una auténtica necesidad para calmar los narcisismos. Para
satisfacer al propio ego. Para anunciar a todos que estamos, y que estamos ahí, o allá o aquí.
Esta buena mujer, solitaria ella, llegó sin
demasiados ambages móvil en mano, levantándolo mientras lo miraba en una
postura cercana a la luxación cervical. Su interés se centraba en buscar su
propia cara dentro de la dichosa pantallita, y en enmarcarla contra un fondo
adecuado, vaya usted a saber cuál. Movía de modo bisoño su brazo y rebuscaba el
ángulo concreto, convertida la pantalla del teléfono en retrovisor de la
realidad que compartíamos, y que por otra parte, ignoraba con desvergüenza y
despreocupación apabullante. Trataba a todas luces de aderezar la composición con la consabida guinda que, cómo no, había de ser
ella misma.
Ocupaba yo un rincón de la acera, pegado a
la pared y sin molestar a nadie, a la espera de las sorpresas que sin
duda me aguardaban entre la muchedumbre, y justo entonces fue que esta señora
se posó, cual mosca en dionaea, a escasos tres palmos de mi
cara.
Invisible no soy ni transparente, y ante la
insolente amenaza de su brazo cercano a mi parietal, me defendí encarando mi
cámara y apuntándole directamente entre ceja y ceja. A decir verdad, no traté
de disuadirla ni de impedir que culminase en su empeño, y como en efecto no
desistió de culminar su tarea, sólo me dejó la opción de
defenderme..., y disparar.
Darle, le di.
Darle, le di.
¿Gané?
Buen fín de semana Calados!
Buen fín de semana Calados!
No hay nada peor que España en fiestas; parece que es una competición para ver quién de todos es más estúpido.
ResponderEliminarJejej..., bueno, la verdad es que creo que hay muchas cosas mucho peores que las fiestas en España... En todo caso hay muchas actitudes que llevan a la gente hacia terrenos "estúpidos". Desde luego, una de ellas es esta tecnológica nueva moda... No el autorretratarse, pero sí hacerlo de manera compulsiva y hasta enfermiza, en todo momento y lugar...
EliminarEn fin... Un saludo.
Yo creo que ganaste porque no me quiero imaginar como quedaría la dona a cuello alzado. Hay que protegerse como sea, incluso a golpe de foto. Es terrible que lleguemos a fotografía r las cosas antes incluso de verlas.
ResponderEliminarPues sí..., es cierto que a veces llegar y ver las cosas parece secundario para algun@s. Lo principal y que más les preocupa es hacerse la foto, con "lo que sea" detrás...
EliminarNo me resultaba fácil centrarme el la falla que pretendía ver, una jovencita, de no más de 17 años, me lo impedía. Me la encontraba una y otra vez: en la falla del Pilar, en la de la Plaza del Ayuntamiento, en la de Convento Jerusalén…Me la encontraba una y otra vez haciendo lo mismo: extendiendo su brazo y sonriendo a la pantalla de su teléfono móvil. Poco le importaban las filigranas decorativas, los impresionantes monumentos falleros y la magia del lugar. Ella estaba en el primer plano de todo, ella y la ampliación de su yo: el gesto detenido, un leve movimiento de melena. Primero pensé en la malvada madrastra del cuento de Blancanieves: “Espejito, espejito mágico, ¿quién es la más bella?”. Después reflexioné sobre la pérdida de la mirada, sobre la incapacidad de ver más allá de nosotros mismos.
ResponderEliminarMe quedo con la interesante reflexión de la última frase de tu comentario: la pérdida de la mirada, la incapacidad de ver más allá de uno mismo... Has enunciado la raíz del problema. Y los móviles han acentuado la gravedad del mismo. O el uso que se hace de ellos.
EliminarGracias Bambi por pasar y comentar! Un saludo!
No sé si alejaba la cara para salir mejor en la foto, o es un problema de presbicia... ;-)
ResponderEliminarEn todo caso, empieza a haber más gente preocupada por lo que tiene detrás que por lo que se encuentra delante. Todo un presagio.
Enhorabuena!
Creo que presbicia, jejej... Así es. Preocupada por lo que tiene detrás, y por ver a quién se lo cuenta. Parece que no baste con el simple y mero disfrute, en primera persona, del lugar o de la visita, de la experiencia propia y en primera persona, y haya que pregonarla, como si eso aumentase su valor. O en el peor de los casos, como si el hacerlo fuera todo lo importante. Muchas gracias Herminio, y se bienvenido por aquí!
EliminarBuen disparo Emilio!
ResponderEliminar¡Primera misión selfie y al facebook! y a contar los "me gusta" que nos van poniendo....decididamente hemos perdido un poco el norte y enfocamos fatal....(tú no)
¡Un abrazo!
Eso es Marinela. El norte rematadamente perdido, pero, por desgracia, ya hace tiempo... El norte hoy en día creo que más bien cae cerca del facebook... ¡Qué pena!
Eliminar¡Un abrazo para tí de vuelta!
Salvando la desviación egocéntrica de abusar del selfie, me parece que junto con el palito es la salvación del que le ha tocado ser el fotógrafo y nunca sale en las fotos, por una vez se encuentran todos en la foto de grupo.
ResponderEliminarTu instantánea es fiel reflejo de la mayor dificultad de acomodación de los mayores a las nuevas tecnologías. Qué difícil lo hace y con riesgo para su salud cervical. No quiero pensar cómo me veré en el futuro con la supermegatecnología que está por venir.
Disparos de besos.
Jejejej..., bueno, hace "millones y millones y millones de años..." que las cámaras traen un mando, el del autodisparador, y que existen los trípodes... Mira que se ha vendido el dichoso "palito"...
EliminarA mí también me acongoja la idea de ir perdiendo trenes, y en el fondo, admiro a la gente que se afana en no quedar atrás. Lo que no aguanto son las "epidemias" de tontuna, cada vez más y más graves.
Besos disparados.
Ja, ja, ja, Es mi comentario. El primero por impertinente la actitud de al señora. El segundo por palurda ella y el tercero por tu diana...
ResponderEliminarPor lo demás es algo ya muy habitual...Movil en ristre atrapando lo que sea y ademas de una forma infima, mala la mayoria de las veces. Porque el movil no es de calidad, porque la persona no tiene ni idea o porque la persona en cuestio no tiene la calidad o cualidad de la prudencia.
La foto buenisima y oportuna. Como siempre. Un abrazo.
Pobrecilla..., tampoco es para tanto, jejejejjj... Ella iba a la suya, su suerte es que yo no era un oso enfurecido, que igual se hubiera parado a selfiarse, jejeje...
EliminarDesde luego, un móvil no es la mejor opción para hacer fotos, pero claro, el mercado es el mercado, y las modas mandan. Y, la verdad, los móviles cada vez son más capaces, y según quién y para qué, pues tienen su hueco como cámara.
El problema es que cada vez hay más gente que olvida que hay una cosa llamada "cámara de fotos"...
Gracias Chelo! Oportuna desde luego... ¡Un abrazo para tí!
fuiste más rápida forastera. Me mata el tema selfie, ahora cuando veo a alguien con un móvil no sé si no pasar por delante o por detrás
ResponderEliminarBesos
Rápido..., y sí, fuí más rápido porque me fui de allí con la foto en el bolsillo mientras ella seguía allí encuadrándose, jejejejj... Besos de vuelta y gracias!
EliminarLo de los autorretratos es una auténtica epidemia.
ResponderEliminarSalu2.
Epidemia... pandemia total y desbocada. De momento no acaba con las vidas pero, no sé si acaba con el significado del autorretrato, que debe de ir más allá de la mera constatación de un "estar", y debiera entenderse como una afirmación de "ser"... El abuso hace que al final pueda interpretarse como un "ser... idiota"... En fín, saludos de vuelta Dyhego.
EliminarMe has hecho reir.
ResponderEliminar"... cual mosca en dionaea.." jajaja
"Invisible no soy, ni transparente....." jajaja
La señora, si ya ha terminado de encontrar el ángulo, podrá decir "yo he estado allí, tengo una foto que lo demuestra"
El móvil ha superado al 3 en 1; es un todo en uno. Estamos en lo de cantidad frente a calidad. Estamos en corre, corre; más, más y yo más y estoy a la última. Tengo de toooo!!!
La tecnología nos ha invadido y nos trae con su marea arrolladora información y soporte para esa información que se renueva a cada momento; polvo y paja, belleza y mierda. Y todo rapidito... El gerundio al instante es pasado. Todo junto y revuelto; envolvente, tentador, estresante... Esto en cuanto a todo, contenidos y forma de hacerlos llegar.
Yo, que soy insaciablemente curiosa , estoy encantada de poder acceder a tanto y tan deprisa. Pero así no. Bueno entiéndeme, cada uno que haga lo que considere... Que me gusta entretenerme con lo que realmente busco y de la manera en que lo busco.
Hay un algo en todo esta ansiosa manera de vivir que me hace desear ser náufrago en isla perdida.
Me ha encantado!!
Lo malo es que al final la gente pasa la lengua en vez de entrar a paladear los sabores del plato... Se conforman con fotografiarse en tal sitio o circunstancia, y dejan en el olvido el recorrer y empaparse de la identidad del lugar o el goce del momento. Los veo constantemente llegando aquí o allá, extendiendo el brazo de espaldas al fondo buscado, y tras unos instantes, reanudar su camino sin apenas llegar a apreciar nada de lo fotografiado. Eso sí, se van con su cara archiconocida ocupando un primer plano ante ese fondo monumental, triste y olvidado, volando en la nube hacia sus contactos... Pena de tics sociales degradantes y alineantes...
EliminarMe pido otra isla!
Un saludo y gracias Nepalí!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarJajaja, muy bueno Emilio. Realmente el fenómeno del selfy, se estudiará algún día en las escuelas y facultades de Sociología, de Psicología, de Antropología...etc.etc
ResponderEliminarEl ser humano es sorprendente siempre, y tú estás ahí para dar fe de ello con tus estupendas instantáneas...
Un abrazo Emilio!!
En las escuelas no sé si se acabará enseñando, pero de momento un hueco holgado en la historia de las vanidades humanas tiene, fijo. Un abrazo de vuelta y gracias Latour!
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