Fernando Fernández Páez.
Fue su recuerdo, su despedida,
ni sus huellas, ni su sonrisa,
sólo una flor para la nostalgia,
mensaje de amor o desengaño.
A la suave luz de una tarde otoñal
desapareció camino al horizonte.
Cómplice entre viento y marea,
a lomos del mágico azul infinito.
Repartió el amor en su viaje,
dejó nostalgias de su presencia,
llevó esperanza para el futuro,
dejó en la playa sus ilusiones...
Partió para no tener y poseer,
para no encerrar y contemplar,
para no rozar sin sentir emoción,
para no marchitarse en la rutina.
Se fue para no olvidar lo que dejó,
para morir de nostalgia y desamor,
desear en la distancia e imaginar...
desear en la distancia e imaginar...
recordar con ternura el día a día.....
La arena indolente recogió su trofeo,
su perfume se fundió con la espuma,
el mar bramó posesivo, enamorado.
E inabarcable, guardó su secreto...
E inabarcable, guardó su secreto...
Triste poema pero muy bueno,abrazo
ResponderEliminarQuerida Fiaris, gracias por tus palabras.
EliminarEs cierto es triste; la tristeza del poeta que asoma en todas sus lineas.....
No hay nada más triste que una flor marchita en un jarrón. La prefiero así, en la arena, húmeda, brillante. Quizá las olas la lleven otras manos y renazca en ellas.
ResponderEliminarSería maravilloso que conservara su frescor y que transmitiera a otros las renuncias de amores pasados..
EliminarUn abrazo Amparo.
El suicidio de un sentimiento, la renuncia, por miedo a que se agote.
ResponderEliminarEs preferible cortar la flor antes de que muera por si misma, la huida es un final más digno que el abandono o la indiferencia. El poder decidir cuando entregarse a un sentimiento y cuando renunciar a él ser generoso al extenderlo antes de elegir otra vida , convertirse en recuerdo.deseado y eterno.
Seguramente no tendrá nada que ver con lo que pretendías transmitir... pero es lo que yo he interpretado
La locura de querer y no poder o no saber. Huir para no sufrir. Sacrificio, renuncia, egoismo..
EliminarCalcetines rotos que llenan nuestro corazón!
Precioso y preciso Latour, un placer leerte como siempre.
ResponderEliminarBesos.
Arwen
Lo que de verdad es un placer es leerte a ti y poder disfrutar de tu espíritu y tu compañía..
EliminarExisto, palabra!
Un gran abrazo.
Tan insólito es encontrar una rosa en el mar como olvidar ese primer amor de verano.
ResponderEliminarLatour, tu poesía es la ola que abraza la flor y la arena dibujada por Fernando. Compenetradísimos. Sensiblemente bello.
Besos.
Realmente creo que compartimos una sensibilidad a flor de piel.
EliminarMe interesa siempre tu comentario.
Un abrazo muy calado!
Me gusta mucho la detallista fotografía y el poema con el que la complementas. Felicitaciones.
ResponderEliminarSaludos.
Ramón
Gracias Ramón, me alegra tener tus opiniones, de verdad.
ResponderEliminarCon una fotografía así es fácil inspirarse.
Un saludo.
A veces perder parte de lo que pudo ser y no fue nos ayuda a superar la pérdida, a olvidar ese recuerdo para que no nos duela. Otras veces, conservar siquiera un ínfimo detalle nos ayuda a conservarlo, con la esperanza de que el recuerdo guardado ahogue la pena de la ausencia sentida. Pequeñas cajas de tesoros que todos hemos tenido. Pequeños objetos que todos hemos perdido o hemos dejado atrás a conciencia.
ResponderEliminarHermoso poema que me lleva a recordar el porqué a veces prefiero olvidar.
Un abrazo Latour!
Muchas veces la renuncia, el dolor al perder lo querido, tiene un componente terriblemente atractivo. Como asomarse a un vacío que nos atemoriza pero nos atrae.
EliminarEl ser humano es muy complejo...
Un abrazo Emilio!
Huyendo del desamor.. cuántos y de tantas maneras. Unos corren enloquecidos y otros se entierran en la arena o incluso sólo se tapan los ojos para no ver, como los niños. Los hay que se inmolan, sin resistencia. Incluso hay quienes suplican dejar de sentir y los hay tan locos que, por el contrario, morirían por unos instantes para amar..
ResponderEliminarQué bonito escribes..
Cuídate mucho.
En un instante se puede pasar de querer dejar de sentir para no morir a querer morir en vida para seguir queriendo...
EliminarDe inmolarse sin resistencia a permanecer para degustar el dolor del sufrimiento.
El amor es un sentimiento muy impuro, cargado de tremendas intenciones, contradictorio y capaz de llevar a la persona a situaciones absolutamente extremas e incluso paradójicas.
Un tierno abrazo Nepalí. Cuida't
me alegro de tu regreso, aunque triste, buen poema y buena foto.
ResponderEliminarFelicidades
Gracias Nauta por tu presencia y tus palabras.
EliminarUn abrazo muy calado.!