Siento que el tema que ocupa mi espacio hoy, esté estrechamente relacionado con el de Latour del miércoles pasado, lo siento, no por vosotros, podéis digerir ésto y mucho más, sino porque haya motivos para hacerlo…
“No puedo olvidar la desesperación que sentí al ver frente a mis ojos todas aquellas personas saltando la valla de Melilla. Eran las siete de la tarde del 23 de Abril de 2014. Fue entonces cuando comprendí que es absolutamente imposible entender el sufrimiento ajeno desde el sofá de casa. No se puede”.
Así empezaba un artículo de Mireia Pujol, que da paso a un cortometraje documental que os presento, titulado “Diario del hambre” Mas de 10 m para el que tenga tiempo y ganas de verlo. El tema de la inmigración llena ríos de tinta, el tratamiento mediático que se hace de lo que ocurre en torno a seres humanos en busca de un sueño y de las dificultades, los riesgos y la barbarie que se encuentran, está sesgado, manipulado, y sólo tiene una explicación “El hambre”
Muchas son las familias que se arruinan para procurarle a uno de los suyos, la posibilidad de poder alcanzar “el paraíso” aún a riesgo de que no haya retorno a una convivencia normal si fracasa.
La crisis económica se ha convertido en demasiadas ocasiones, en motivo para retroceder en el avance de la lucha contra el racismo y la xenofobia”, es más, la situación actual ha transformado en chivos expiatorios a algunos grupos vulnerables como son los inmigrantes y los solicitantes de asilo, a quienes se les acusa de ser la causa de la difícil situación económica,
Reconociendo que la crisis ha repercutido negativamente en la sociedad española. ¿No vislumbramos una dinámica en curso, que deberíamos considerar seriamente, para evitar el deterioro de la situación, relacionada con el racismo en España?.
Culpar, como se hace, a los grupos más vulnerables, de la crisis económica, puede generar un clima de hostilidad y violencia racial contra estos grupos. Y no digamos si el discurso de odio y xenófobia ha sido esgrimido por dirigentes políticos. Los líderes políticos tienen la responsabilidad de denunciar en términos rotundos este tipo de discurso, en particular, cuando sale de sus propias filas.....
"La mierda ya no viene, la echo yo a base de hostias". Josu Bergara, Alcalde de Sestao
(Declaraciones que salen a la luz por una cámara oculta)
Con el apoyo de toda la Corporación Municipal comparece y rectifica, como se lo habían pedido todos los grupos políticos del parlamente vasco...
¿No será que en el fondo, somos un poco racistas, que nos cuesta admitir que el respeto a la dignidad de cualquier ser humano, debería ser una prioridad?
La desesperación de ellos cuando nos miran, hace que bajemos la cabeza de verguenza...
Marinela